Moita Ciclável nació como una página de Facebook, pero podría convertirse en un movimiento asociativo. La idea es formar una masa crítica y proponer soluciones que ayuden a equilibrar el espacio público.

Cuando hablamos de construir carriles bici, solemos centrarnos en Lisboa. Pero eso no significa que otras partes del área metropolitana no estén también intentando hacer su ciudad más ciclable.También intentan movilizar a sus conciudadanos para recuperar el espacio público, al tiempo que ejercen presión pública para que se produzcan cambios estructurales.
Sérgio Franco da vida a esta idea. Es en Moita donde trabaja y se gana la vida, y es en bicicleta donde se desplaza. Eligió la bicicleta porque la ciudad es prácticamente llana, las distancias son cortas y porque le gusta pedalear. Lleva varios años pedaleando. Moita ciclable, una página de Facebook donde comparte y discute sobre la movilidad en la ciudad de Moita y en todo el municipio, debatiendo con quien aparezca en la caja de comentarios. La página es también una plataforma para dar a conocer los cambios que el municipio puede hacer en favor del uso de la bicicleta, y en los últimos meses ha habido unos cuantos.
Uno de los que más entusiasmaron a Sérgio fue un tramo de carril bici en la Estrada dos Espanhóis, entre dos rotondas, que une el centro de la ciudad con una zona de supermercados. El límite de velocidad en esta carretera es de 70 km/h porque se trata de una carretera nacional, así que el carril bici estaba segregado con separadores de hormigón tipo New Jersey, algo inédito en Moita. Sérgio no ocultó su entusiasmo por esta transformación en su página de Facebook, compartiendo las distintas etapas de la obra, que concluyó a principios de este año. "La carretera tenía dos carriles con arcén. Ese arcén se convirtió en un carril bici de doble sentido"explica. "La barrera de hormigón da a los automovilistas una señal diferente y también calma el tráfico y la velocidad".



El tramo tiene menos de 500 metros de largo pero tres metros de ancho (lo que está muy bien), pero es una importante adición a la movilidad ciclista de la ciudad. "Da acceso a dos supermercados y también a otra urbanización, uniéndola al centro de Moita"contextualiza. "Tenemos que considerar la bicicleta como un medio de transporte, no sólo para el ocio". El carril bici era barato -una inversión municipal de 38,95 mil euros- y puede dar pistas sobre cómo ve el ayuntamiento de Moita la construcción de la red ciclista a partir de ahora: más orientada al ciclista utilitario, menos al de ocio.
Una oportunidad aún por explorar

En una soleada y fría mañana de sábado de invierno, Sérgio se reunió con dos amigos y mostró a LPP cómo es ir en bici por Moita, qué infraestructuras hay y qué queda por hacer. La ruta culminó en el ya mencionado nuevo carril bici de la Estrada dos Espanhóis, pero pasó por los barrios más antiguos de la ciudad. Tras el paseo en bicicleta, se tiene la sensación de que aún quedan muchas oportunidades por explorar en una ciudad relativamente llana y pequeña -por lo que las distancias son cortas- y en la que hay mucho menos estrés vial en comparación con Lisboa, por ejemplo.
Sérgio y sus amigos no dudan de que la bicicleta podría utilizarse más en Moita. "La idea por la que luchamos es la creación de carriles bici exclusivos para bicicletas y también para personas con dificultades motrices (cuando pensamos en carriles bici, no sólo pensamos en bicicletas: hay personas en silla de ruedas que los utilizan), posiblemente reservando también espacio para los peatones"señala Sérgio.

Como muchos otros municipios, el Ayuntamiento de Moita cuenta desde hace años con un plan de itinerarios ciclistas.El objetivo principal del proyecto es crear nuevos carriles, para lo que se han definido ejes prioritarios de intervención y distintos tipos de carriles: algunos segregados como el de la Estrada dos Espanhóis, otros compartidos con coches (zonas 30 o de coexistencia) o peatones (carriles compartidos); algunos a nivel de la calzada, otros en la acera. Pero sólo poco a poco los proyectos van saliendo de la mesa de dibujo.
"Creo que una red tardará mucho en llegar"dice António João, uno de los amigos de Sérgio que utiliza la bici más para el ocio. Sérgio es más optimista: "Va a llevar tiempo, pero tenemos que celebrar los pequeños logros. Aquí, en la Estrada dos Espanhóis, conseguimos un carril bici segregado. Fue un pequeño logro", afirma. "Pero nos gustaría mucho que hubiera una red integrada de carriles bici que conectara también con otros municipios. Por ejemplo, nos conectaría también con Montijo para ir al cine, porque en Moita ya no hay cine. Nos gustaría ir al cine con nuestros hijos, ir solos, ir con nuestras mujeres, nuestras novias, nuestros amigos. Nos gustaría ir de compras, al centro comercial, como todo el mundo, pero tranquilamente, con seguridad y en bicicleta. Porque nosotros también deberíamos poder elegir".

El diseño urbano influye en la movilidad que elige la gente. Si favorece al automóvil, haciéndolo más seguro, cómodo y rápido, así se desplazará la mayoría de la gente que pueda permitírselo. Este privilegio excluye a otras personas. No sólo los que no pueden permitirse un coche, sino también los que no pueden conducir. Como los niños. "El colegio al que iba mi hija suele tener mucho tráfico alrededor porque, ante la sensación de inseguridad en las carreteras, los padres llevan a los niños en coche"dice Nuno Faria, el amigo que faltaba por presentar en esta historia. "La carretera tiene incluso varias paradas de autobús, pero sin acera. Hay tres paradas en una carretera sin bordillo ni arcén, con mucho tráfico y por donde pasan muchos estudiantes. Ahora en invierno, por la noche, vienen por la carretera sin luces, lo que es peligroso". A fin de cuentas, "esto es una bola de nieve" porque las mamás y los papás que llevan a sus hijos a esa escuela "podrían ir a pie o en bicicleta si hubiera un acceso seguro". Los propios niños y jóvenes podían ir por su cuenta.
"Yo también tuve a mis hijos en esa escuela. Durante ocho años, fui todos los días a llevarlos"", dice Sérgio, que solía transportar a los niños en bicicleta y corrobora la falta de condiciones. "Como ciclista, aprendí a colocarme de forma diferente en la carretera. Me di cuenta de que cuanto más a un lado, peor para mí y para mis hijos. Y empecé a colocarme más hacia el centro de mi carril, para estar más dentro del túnel de visión de los automovilistas. Y no lo parece, pero provoca más respeto por parte de los automovilistas".
Nuno hizo lo mismo. "Llevé a mi hija. Ella iba en su bici y yo en la mía. Yo iba detrás para protegerla. También nos colocamos en el centro de la carretera. Ella se inclinaba un poco más que yo, claro. Pero a veces me tocaban el claxon, incluso con una niña".dice. "Como es una carretera sin aceras ni arcenes, y los coches tienen prisa por dejar a sus hijos y demás, pues eso... Muchas veces dejaba la bici y cogía el coche".
Cambiar el coche por el coche

A Sergio, renunciar a su bicicleta ya no era una opción cuando cambió su coche por una bicicleta de carga hace unos años. Es donde hace su vida hoy, adaptándose a las circunstancias. "Es una longtail, lo que significa que es una moto más larga en la que puedo llevar a mis dos hijos, pero también la compra. Lo hago todo con la bici. Hacer la compra, ir a la farmacia, todo. Cuando llueve, llevo mi poncho y el de mis hijos. Y para ir de compras es lo mismo, tengo unas alforjas con fundas impermeables, y ya está, hago mi vida sin estrés, no me quedo atascada en el tráfico".
Al principio, dice, la gente le miraba con cierta extrañeza al ver una bicicleta de carga, distinta de lo habitual. Pero si la extrañeza fue remitiendo con el tiempo, dice que vio surgir a otros entusiastas de las dos ruedas "Cada vez hay más gente que va en bicicleta. Y también se empieza a ver a mucha gente con niños en cochecitos. Cada vez más. Estoy muy contento".

Aunque cada vez es más frecuente ver a gente en bicicleta por Moita, sigue predominando el uso lúdico o deportivo. "Lo que también queremos fomentar es el uso de la bicicleta como medio de transporte diario para el día a día normal, algo que podemos conseguir muy bien aquí en nuestro pueblo y en nuestro municipio, porque es prácticamente todo llano"dice Sérgio. "Pedalear por el centro de Moita es tranquilo. En hora punta se nota un poco más el estrés de la carretera". António está de acuerdo y dice que, como las distancias dentro de la ciudad son cortas, la bicicleta es una mejor opción. El hecho de que utilice tanto el coche como la bicicleta da a António una mejor perspectiva de ambas partes. "Las personas que utilizan la bicicleta son mejores conductores de coches"dice. "De una forma u otra, tengo que ser consciente de lo que me rodea, quién viene, quién va, peatones, coches, bicicletas; y tengo que cumplir las normas y velar por mi seguridad. Si todo el mundo hace eso, las cosas van bien".
António, Sérgio y Nuno han practicado el uso de la bicicleta y eso les da más confianza a la hora de circular por Moita. Pero son conscientes de la existencia de grupos más vulnerables y de la necesidad de movilizarse en torno a infraestructuras que creen espacios para todos. "Cuando hablamos aquí, tenemos que recordar que probablemente seamos personas que corremos más riesgos. Pero cuando se piensa en carriles bici, hay que pensar en las mujeres, los ancianos y los niños. Estos usuarios necesitan más seguridad, necesitan algo que les haga sentirse seguros". En los últimos meses, el Ayuntamiento de Moita ha colocado hitos de demarcación en algunos carriles bici del municipio, definiendo mejor el espacio para el ciclismo. Este fue el caso de la ecovía que ofrece una agradable vista del paseo marítimo entre la ciudad de Moita y la aldea de Gaio-Rosário. Se trata de un tramo ciclopeatonalizado que existe junto a una carretera por la que se puede circular a un máximo de 70 km/h y que ahora cuenta con bolardos de madera. Cuando termina esta ecovía, en el lado Gaio-Rosário, comienza un carril bici pintado junto a unas carreteras locales y da acceso a una zona de baño. Aquí se han colocado balizas de goma.


"En una carretera de 30 km/h, basta con clavijas de plástico. Porque es una zona de 30, aunque haya automovilistas que no respeten el límite. Pero es suficiente".dice Sérgio. "Pero, por ejemplo, en esta carretera española, se puede ver que hay velocidades realmente altas. Las clavijas no son suficientes aquí"añade. Para Sérgio y el resto del grupo, la mayor dificultad aún por resolver en el uso de la bicicleta es el desplazamiento entre lugares. "Me ha pasado yendo de aquí a Montijo y que un autobús de pasajeros me pase a un palmo del manillar"dice António.
Segregar fuera de la ciudad de Moita
El carril bici de la Nacional 11 no llega hasta Alhos Vedros, sino que se detiene en Quinta Fonte da Prata. "El gran punto crítico es Moita, Alhos Vedros, Baixa da Banheira. Es un lugar donde no hay carril bici, es un lugar con mucho, mucho tráfico. Y ahí es donde me resulta más difícil ir en bici, donde nos silban, donde nos dicen que nos subamos a la acera".explica Sérgio. "Y como decía António, la salida hacia Montijo es otro problema que tenemos. Dentro del pueblo de Moita, podemos movernos con relativa tranquilidad. Si queremos ir a otra parroquia, pueblo o municipio, se vuelve muy peligroso".

Para satisfacer estas exigencias y deseos, la Moita ciclable quiere ser algo más que una página de Facebook. El plan es acabar creando una asociación para empezar a reunir a la gente y empezar a formar una masa crítica en el municipio en torno al ciclismo. El objetivo no es sólo formar una voz política que pueda dialogar con los responsables políticos y representar voluntades comunes, sino también desempeñar un papel educativo y de concienciación en la comunidad. Empezando por las escuelas. "Nos gustaría trabajar con los colegios y crear una escuela de la bicicleta para enseñar a los niños a ver la bicicleta no sólo como ocio, como un juguete, sino como un medio de transporte que les da independencia"explica. "Demostrar que no tienen que esperar a los 18 años para sacarse el carné y que pueden adquirir independencia para moverse por el municipio"Recuerda una época en la que el ciclismo era la norma, antes de la presión de las carreteras. "Hacíamos esto cuando éramos niños. Íbamos a todas partes en bicicleta, en una época en la que no había las limitaciones de ahora. Hoy hay más coches y menos paciencia en la carretera. Pero se puede aprender a vivir con ello".
Pero si la intervención política es uno de los objetivos, el camino para llegar a ella también toma otras vías. El grupo de amigos reconoce la importancia de estos grupos simplemente porque sirven para reunir a la gente y promover encuentros. "Desde hace algún tiempo, la gente de Moita habla de crear una pequeña organización para organizar paseos en familia, pero tienen que ser algo más que ciclismo de fin de semana, tienen que ser algo más. Podría haber picnics, almuerzos, paseos temáticos... así que la gente se ha apuntado"añade António. De estas reuniones y encuentros pueden surgir ideas, ya sea para proponer al municipio o para hacer. Puede haber masa crítica. "La idea es tratar de unir todo y crear la fuerza aquí para poder tener masa crítica aquí, para poder proponer y ayudar a equilibrar el espacio público"añade Nuno.
